¿Qué pasa si hoy muero?

¿Soy (en este momento) quien quiero ser y soy quien quise y he querido ser?

Hoy que tengo 20 (30, 40 o 50) años ¿soy como honesta, ingenua y (muy probable) bondadosamente lo desee cuando tenía 5, 6o 10 años?

Quién en su infancia no pasó un minuto de su tiempo pensando, quizás como juego, aquello que quería ser "de grande". Quién no lo ha pensado alguna otra vez en su vida.

Una experiencia que quizá muchos también vivan es cuando en la secundaria o preparatoria (entiéndase entre 12 y 16 años) te piden para cierta materia un collage o un dibujo en cartulina o algo parecido en el que "retrates", en el que puedas describirte ante todo el grupo de compañeros. Y no es fácil, porque muchos son tímidos, porque la mayoría (si no es que todos) compartimos "esa" parte privada, íntima, o esa parte que no "decimos abiertamente", que sólo compartimos con aquellos amigos allegados, que no describimos, sino que los demás se encargan de averiguar.

Ahondaré un poco más en esta experiencia porque me parece realmente interesante e importante en el autodesarrollo y crecimiento. Quizá (personalmente) tuvimos dos auto-presentaciones con un collage en el que NO podemos nuestras propias fotografías. Me parece interesante porque hasta cierto punto "nos estamos describiendo con imágenes y frases cortas" (si no es que ninguna palabra), con imágenes que NO son nuestras, que NO son personales, pero imágenes que escogemos porque "coincidimos" o "nos parecemos" a los demás, no a todos o muchos o pocos, pero nos parecemos, porque somos semejantes.

Y por supuesto como adolescente, y aunque no lo fuéramos, por el sólo hecho de ser humano quizá tratamos de hablar de "nuestros puntos fuertes", de nuestros valores, de nuestros aciertos y por supuesto como un papá o mamá (orgulloso) haría, destacamos nuestras virtudes, minimizando sino es que ocultando (u "omitiendo detalles") nuestros errores.

Y el tema de la exposición es: ¿Quién soy?. Vaya pregunta. Y se me quedó un frase de un amigo mío que empezó a hablar así:

- Bueno (buenos días o tardes) pues ¿QUIÉN soy? - señalando el título en la cartulina - pues yo creo que es una pregunta que me hago todos los días o de vez en cuando...

A algunos les parezca intrascendente, u opinen: ¿y qué? (so what?), pero es que: ¿no lo ven? A esa edad es importante y me atrevo a decir que ¡a la edad que sea!. Por esa importancia hago el título y las primeras líneas de este artículo. Lo demás, lo dejo al (a la) amable lector(a).

Algo parecido sucede cuando a uno le encargan una "biografía", cuando haces un trabajo escolar y la maestra o maestro te piden: "Pues como es hasta cierto punto un libro de autores con sus poemas y escritos, y uds han escrito uno, van a poner su biografía también."

Si nos vemos en retrospectiva, si nos describiéramos ante alguien más (no a 10 0 30 personas), sólo una, ¿qué sentiríamos o que pensaríamos de nosotros mismos mientras hablamos?.

Y supongo que una persona más o menos ávida o astuta podrá entender o se preguntará si las cosas deben contarse "como fueron" (lo más apegado a la realidad) o bien pueden "omitirse detalles". En lo personal algunas biografías de los grandes genios parecen "ensalzar" las virtudes, y uno dice: "bueno, pero que este tipo ¿nunca rompió un plato?".

Y como leo en "Caballo de Troya 4 Nazaret":

contemos los hechos tal y como ocurrieron y no como nos hubieran gustado que fueran...

Cuando entramos en detalles (he ahí una importancia más de los "detalles") es cuando entendemos las actitudes, cuando comprendemos los motivos que llevaron, que motivaron, que causaron las acciones de las personas. Es así como se comprenden "hasta cierto punto" los errores o aciertos de los demás.

Nota final: Pensemos de vez en cuando en el futuro, porque será definitivamente (algún día) parte de nuestro pasado. Vivamos el presente, sí, pero no olvidemos de dónde venimos, nosotros y los demás. No vivamos siempre en el pasado pues nos estaríamos "estancando", ni dejemos que nuestros sueños sean la "utopía" en que vivamos.