Mostrando las entradas con la etiqueta Mini-discurso. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Mini-discurso. Mostrar todas las entradas

mayo 06, 2006

De Gigantes y Detalles

Señores, la humanidad avanza a pasos agigantados, hoy sabemos lo que muchas generaciones hicieron bien y dejaron de legado. Así nosotros, también formamos parte de este movimiento de progreso. Pero cuidado, no demos pasos agigantados para andar a trompicones, no demos pasos agigantados para saltar o esquivar baches, para pasar por donde nos conviene, no demos pasos agigantados para pasar por encima de las demás personas, demos pasos firmes, uno tras otro, no queramos ser los jóvenes intrépidos pero inexpertos ante la vida.

Quizás no dejemos la vida en todo lo que hagamos, pero sí dejemos un granito de arena donde podamos, un granito de arena para llenar esos baches, esos hoyos de ignorancia, de maltrato, de indiferencia entre las personas, un granito de arena para sanar esas depresiones. No demos pasos agigantados para avanzar lo más que podamos si el camino que hemos dejado no fue lo más recto posible, si ese camino que quizás sirva de base o ejemplo para alguien más ha quedado con manchas, con suciedad, con huecos de ignorancia, con depresiones que puedan hundir aún más a los que quizás nos sigan. Dejemos un granito de arena para dejar el camino plano y recto, o quizás un granito de arena para que entre todos podamos hacer esa pendiente ascendente, esa montaña que todos puedan subir.

Hoy, estamos sobre los hombros de gigantes, pero no aprovechemos esta situación para burlarnos de los que están abajo, para presumir nuestra situación, de nada sirve la altura si antes de eso no pudimos aprovechar los detalles que sólo pueden apreciarse cuando se está abajo, antes de vanagloriarnos y reclamar el trabajo que podamos pedir desde nuestra situación, recordemos el trabajo que cuesta cuando se está en esos zapatos, cuando el recorrido no es sobre hombros y nubes, sino cuando el camino se recorre con el propio esfuerzo, no presumamos, sino más bien, tendamos la mano para que los demás puedan alcanzarnos.

Recordemos nuestra preparación y hagamos que valga la pena, sigamos desarrollándonos y recordemos siempre que nuestros años de preparación han sido para saber tomar decisiones, para darnos una idea de los diversos caminos y para saber elegir el que más nos gusta, o el más apropiado para nosotros. Y por favor nunca olvidemos, que la preparación tampoco es presunción, que nuestra preparación también nos otorga una obligación, pues:

“Mientras mejor preparados estemos, MEJOR debemos servir”.


Keywords: While better prepared we are, BETTER we must serve. Being better.

Agradecimiento de un graduado. Trabajo.

Hoy salimos al mundo laboral, a integrarnos a esa platilla de millones de personas activas, quizás no podamos decidir a dónde irnos en un principio, quizás no decidamos con quién queremos trabajar, y quizás no seamos dueños de nuestra propia empresa aún, pero somos dueños de nuestro destino, sí podemos decidir CÓMO trabajar y CÓMO ser ejemplo de superación. Sí podemos ser esa persona que a pesar de las circunstancias siempre dé una buena cara y entregue su esfuerzo en su trabajo. Tan sólo pregúntense: ¿Quién no ve con buena cara a quien es esmerado y dedicado en su trabajo?, ¿quién no estará satisfecho de tener entre su plantilla de empleados a personas que demuestren que quieren salir adelante y superarse?, ¿quién no aprecia a la persona que busca un ideal y mantiene sueños por alcanzar?

Señores, el cambio principal entre las personas está en su espíritu. No necesitamos tenerlo todo para ofrecer lo mejor de nosotros mismos, necesitamos tener ideales y metas que nos motiven a alcanzarlos. No importa que tengamos el puesto más bajo, será el espíritu que mostremos el que hable por nosotros, será ese sello que nos distinguirá estemos donde estemos. Habrá personas mejores, y no por ello debemos bajar los brazos, sino por el contrario ver a un compañero en potencia.

Quizás no seamos los mejores en este mundo, pero si en alguno hemos de serlo, no deba darnos pena sino orgullo que en el reino espiritual, sea el nuestro uno de tantos que brille por las ganas y el ímpetu que siempre mostró por salir adelante, por dar un bien a la sociedad, a nuestra familia y lo más importante, sentirnos bien con nosotros mismos.

Y vuelvo a repetirlo, no importa donde estemos. Vale recordar que:

El que es perico, donde quiera es verde.


Hoy. Hoy es nuestro turno y nuestra oportunidad de hablar y también de decir: GRACIAS. Gracias papás, gracias tíos, gracias padrinos, gracias maestros, gracias amigos.

Gracias papás por aguantarnos casi 20 años estudiando, 240 meses, 7200 días, 172 800 horas, soportando desvelos con nosotros y por ser consuelo y desahogo de angustias o temores. Gracias por ser esos ídolos de nuestra infancia, por ser esos maestros de la vida, esas bases de nuestra personalidad, por aguantar a esos adolescentes comelones, irritables, gritones y pachangueros. Gracias por esa preocupación que nadie les enseña y que nosotros perpetuaremos. Gracias por ser esa ilusión de Navidad, por esos Reyes Magos, por esas sorpresas que intentaron darnos, por esas sonrisas que nos causaron, por esas alegrías, por esas correcciones que hoy nos llevan al camino correcto. Gracias por ser esos niñeros, esos fabulosos cocineros, esos preocupados enfermeros, esos humildes doctores, esos inigualables confesores, esos cuenta-cuentos, esos compañeros de juegos. Gracias por ser esas personas preocupadas de sus hijos.

Gracias profesores por mostrarnos su punto de vista, por alentarnos, por ayudarnos, por esa amistad que algunos supieron dar, por esa exigencia y costumbre de trabajar que nos inculcaron. Gracias por ser esos alentadores de espíritu, esos señores y señoras cultas que comparten su conocimiento y sus experiencias. Gracias a los padres, maestros e incluso amigos que pusieron ejemplo y camino a seguir y a veces evitar, gracias de todo corazón.

Hoy, como muchos días pasados y futuros, nuestros caminos tomarán distintos rumbos, y muchos de nosotros esperamos volvernos a ver, y cuando llegue ese día, ojalá sea para decir: yo soy amigo de ese Jefe de departamento, yo soy amigo de ese Coordinador, yo soy amigo de ese a quien todos aprecian y todos necesitan, yo soy su amigo y al verlo, me siento muy orgulloso, porque en verdad se lo ha merecido. Yo soy su amigo y no tengo temor ni pena de saludarlo, pues he caminado lo más que he podido, por el sendero más recto y justo que he encontrado. Dios nos bendiga y nos ilumine el camino correcto, no pidamos que nos lleve por él, simplemente sepamos encontrarlo, identificarlo y seguirlo.

Post relacionados:
  • De Gigantes y Detalles.
    [...] estamos sobre los hombros de gigantes, pero no aprovechemos esta situación para burlarnos de los que están abajo, para presumir nuestra situación, de nada sirve la altura si antes de eso no pudimos aprovechar los detalles que sólo pueden apreciarse cuando se está abajo, antes de vanagloriarnos y reclamar el trabajo que podamos pedir desde nuestra situación, recordemos el trabajo que cuesta cuando se está en esos zapatos, cuando el recorrido no es sobre hombros y nubes, sino cuando el camino se recorre con el propio esfuerzo, no presumamos, sino más bien, tendamos la mano para que los demás puedan alcanzarnos. [...]

  • Experiencia y cambio.
    El número de actividades que realizamos no indica que seamos mejores, es lo que aprendemos con todas esas actividades, es la calidad con la que realizamos esas actividades, es la actitud lo que hace la diferencia, lo que aprendemos como dije, eso señores, es EXPERIENCIA. [...]


Keywords: frases, palabras, despedida, graduación, discurso, agradecimiento.

abril 22, 2006

Experiencia y Cambio

El número de actividades que realizamos no indica que seamos mejores, es lo que aprendemos con todas esas actividades, es la calidad con la que realizamos esas actividades, es la actitud lo que hace la diferencia, lo que aprendemos como dije, eso señores, es EXPERIENCIA.

Vivimos en un mundo donde todos necesitamos de todos, pero no somos DEPENDIENTES de los demás, nosotros somos un castillo, un edificio, un rascacielos si queremos, pero no estamos colgados de un edificio más alto, no nos mantienen flotando las nubes ni nadie debe manejarnos desde más alto, no somos tampoco títeres. Crecimos sobre bases y nuestras bases son nuestros padres, nuestras enseñanzas desde pequeños, nuestra EDUCACIÓN y nuestra FORMACIÓN que de ellos o de nuestros tutores aprendimos ¡esos son nuestros cimientos!, y las personas que nos encontramos en el camino nos ayudarán a crecer, nadie le dice a un árbol cómo debe crecer, son las circunstancias y la forma de enfrentarlas lo que hace a un árbol débil o fuerte, la forma en que tiene arraigadas sus raíces, quizás nos derribarán si somos muy débiles, ¡enfrentemos a la vida!, tengamos firmes nuestros cimientos y apoyémonos en los demás, mas no basémonos en ellos, nosotros como amigos somos un apoyo para los demás, nuestros amigos son un soporte, una AYUDA, pero no son como nosotros.

“Crezcamos alto, pero no tan alto que las nubes no nos dejen ver nuestros pies”.

No seamos edificios estancados, no nos quedemos en una época de nuestra vida, no sucede que el árbol NO CAMBIE y el clima se AMOLDE, es al revés, el clima cambia y el árbol se ADAPTA. No seamos edificios cerrados que dejen pasar luz, o que causen sombra a los demás, no, más bien seamos nosotros los edificios que iluminen, seamos ese edificio que esté abierto y que dé un buen recibimiento a las personas, ACTITUD señores.

Lo que nos hace personas, señores, NO son las CANTIDADES, son las CUALIDADES; no son los NÚMEROS, son las ACTITUDES, son nuestras CAPACIDADES y lo que HACEMOS con ellas.

Ejemplo muy sencillo, muchos podemos hablar, y ¡qué bueno es!, eso nos distingue de muchos otros animales, pero de qué sirve que podamos hablar si no somos capaces de dar una palabra de aliento en el momento preciso, si no somos capaces de decir tan siquiera GRACIAS, te lo agradezco, si no somos capaces de completar un simple ADIOS con un QUE TE VAYA BIEN, una palabra de preocupación por los demás. Y dichoso aquel que se cuente como una persona que no necesita nunca en su vida de ser alentado ni que requiera de un agradecimiento o una llamada sólo para saludar o saber cómo nos encontramos.

Señores, tenemos brazos para saludar y abrazar en momentos gratos o difíciles. El cambio NO está AFUERA de la escuela, ni tampoco está adentro, no en los maestros, ni en los compañeros, no está en los demás, no en las instalaciones, está en NOSOTROS.

No nos encontremos sentados para perder el tiempo, para estar ociosos; si alguna vez nos encontramos sentados, esperemos que sea para servir de apoyo a nuestros compañeros, para estar presentes en la necesidad de alguno de ellos, estar sentado cerca de ellos, al lado de ellos, y no sentados perdidos en algún lugar donde nadie nos ve, donde nadie puede siquiera tener un hombro en cual apoyarse. Así como el futuro padre está nervioso fuera del quirófano donde su esposa está dando a luz a su primer hijo, seamos ese amigo leal, ese compadre que aunque no puede estar más cerca del futuro padre, seamos esa persona a quien el marido puede ver desde el pasillo, desde la puerta o desde la ventana, ese amigo que dará un abrazo ante cualquier noticia que le den.

El cambio no está en lo que DERRIBAMOS, está en lo que CONSTRUIMOS, no en lo que GOLPEAMOS sino en lo que ABRAZAMOS, no en lo que DECIMOS, sino muchas veces en lo que CALLAMOS.

Keywords: experience, education, formation, attitude, qualities, capacities